domingo, 23 de junio de 2013

El Match Point de Freud en Woody Allen

   
Nuestro extrovertido director neoyorkino Woody Allen marca un nuevo estilo en su forma de hacer cine, pues es notorio que existe un antes y un después de Match Point (2006) dentro de la amplia filmografía de nuestro simpático, o a veces antipático, cineasta. Esta vez, la historia que teje el señor Allen es la de un tipo llamado Chris Wilton –interpretado por Johnathan  Rhys Meyers- que en pleno trajín hacia el éxito y poder conoce a una mujer multimillonaria Chloe –Emily Mortimer- con quien decide casarse. Más tarde, su compromiso se ve afectado por la vida paralela que oculta el protagonista con la hermosa y sensual Nola –Scarlett Johansen- quien le exige atención absoluta. Sin embargo, Chris demuestra que es lo suficientemente ambicioso en llevar a cabo sus objetivos que toma medidas extremas sin importarle poco las consecuencias a posteriori de estas.

 
El perfecto encaje del título con la trama marca en principio la buena nueva que nos prepara Allen, tenemos un Woody fresco, novedosa,  casi otrora irreconocible. En Match Point, colgó su estilo satírico y burlesco, dejando atrás títulos como Bananas (1971), The Sleeper (1973), Annie Hall (1977), Zelig (1983), entre otras, para abrir paso a un renovado Allen, quien con este film abre las puertas a degustar apetitosamente un new suspense, un suspenso renovado con matices mas postmodernas. Engendra Match Point a partir de una idea bastante convencional y sobreexplotada en la pantalla grande: un triángulo amoroso. Sin embargo, Woody demuestra ser todo un genio en su campo, pues sabe, inteligentemente, como captar el interés del espectador con una idea que en principio puede parecer poco atractiva y repetitiva, y que conforme la trama avanza esta evoluciona, volviéndose inquietantemente adictiva. Con su longeva experiencia  y su hipnotizante perspectiva cinematográfica plantea magistralmente la escalofriante historia de Chris W. y su lío con ds mujeres. Siendo esta obra un claro ejemplo que en el arte no es el qué sino el cómo lo que realmente importa.

El dilema delirante de Chris Wilton de ¿amor o lujuria? es reconocido en el planteamiento teórico- filosófico de la vieja escuela psicoanalista de Freud: ¿vida o muerte?, instinto de vida o instinto de muerte, Thanatos o Eros (Freud, 1920).  Representado en la disyuntiva del personaje en dos mujeres opuestas: por un lado, una amable, culta y multimillonaria mujer inglesa; y por otro lado, una rebelde, despampanante y sexy mujer americana actriz. Como en Más allá del principio del placer (1920) de Freud, el desequilibrio psicológico del protagonista trasciende a partir de su conflicto con ambos opuestos, entre la formación de una vida plena y su inclinación a la destructividad de lujuria y de poder. El fuerte cargo de consciencia y el desgaste psicológico que Chris mantuvo durante buen tiempo lo condujeron al declive personal, social y moral, provocando en él la manifestación desbordante de un grave trastorno de personalidad sociópata. Como señale antes, cada fémina desenmascara un opuesto distinto en su personalidad. El colapso estructural de la personalidad de Chris se hace más evidente, su id cada vez aplasta más a su ego, y patológicamente el placer se impone sobre la realidad, por lo que le es necesario tomar medidas apuradas.  La presión y el choque entre ambos opuestos fue lo que finalmente detonó la descabellada decisión de Chris. Thanatos tomó el control sobre él.

Asimismo, a pesar de la trastornada personalidad que él iba manifestando en el trascurso de la película, Woody señala que existen factores externos al individuo -casi espectrales- que intervienen en su trazar de vida. En ciertas circunstancias, a veces nuestro destino depende de pequeños golpes de… ¿destino? De… ¿suerte? Match Point es también una película sobre la suerte, sobre el crucial papel que este juega en el futuro de Chris y en nosotros, en el desenlace final.  De esto se hace referencia en el prologo: “Prefiero ser un hombre con suerte que un hombre bueno”, palabras serias que diseñan una perspectiva caótica que va más allá de lo que puede representar al bien y al mal –sin principios morales-, un efecto del inconsciente colectivo según el psicoanalista Carl Jung (1921) aunque para Freud (1929) –así como para Jean Peaget- no es más que una inclinación de los individuos sociales hacia su locus de control externo. Cosa que contradice y no Allen en Match Point.  Esos pequeños detalles que nosotros llamamos azar, para Woody, no es más que el producto de la fuerza que ejerce el destino, subrayando la sinonimia de suerte-destino,  por lo que no resulta extraño que finalmente nuestro protagonista justifique su conducta fría y calculadora con citas del trágico Sófocles: “no haber nacido es el mejor premio” (Edipo Rey), alegando en términos psicoanalíticos una neurosis del destino, "(...) dan la impresion de un destino que los persigue, de una orientacion demoniaca de su existencia" (Freud, 1920). Detalle que hay que tomar en cuenta para reincorporar a Allen en la teoría freudiana.


Finalmente (haciendo un paréntesis), la selección musical se adecua extraordinariamente con la película, cada opera y soneto es un deleite y una pegada precisa en cada escena, sobre todo debo destacar las interpretaciones elegidas del hace mucho tiempo desaparecido cantante Enrico Caruso, como por ejemplo ese gran final de “O figli, o figli miei!” -extraído de Macbeth- con una letra tan desgarradora y trágica como cualquier historia de Sófocles…y hablando del destino. Y por último, también vale la pena honrar la dirección fotográfica de Remi Adefarasin que jugó un papel imponente en la duración de la película, con enormes encuadres que seducen y aumentan la angustia y tensión en el film.

 
Fuentes:
Sigmund Freud (1920) Más allá del principio del placer. En: Obras completas, Tomo III.
Sigmund Freud (1929) El malestar en la cultura. En. Obras completas, Tomo III.
Carl Jung (1921) Tipos psicológicos
Match Point (2006), dirigido por Woody Allen

  







 

6 comentarios:

  1. Que interesante el poder juntar la psicología con el arte del cine. Muy interesante Blog, ansiosa por la siguiente publicación.

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  2. Buen articulo sobre esta película, Robert. estamos esperando tu siguiente articulo.

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  3. Buena pelicula e interensate psicoanalisis de la personalidad ambigua del personaje.... espero más publicicaciones.

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  4. Me resulta interesante esta fusión entre el séptimo arte y las teorías de un genio de la psicología como lo es Freud.

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  5. Y el síndrome de Estocolmo que tiene que ver con esta película mi estimado Robert?

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  6. Me parece sumamente genial el hecho de que hayas podido relacionar el contenido de esta película con una teoría tan compleja como lo es la psicoanalítica. Sin duda ha sido un buen aporte y déjame felicitarte por la relación entre psicología y el cine.

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